Enamorate del super auto Koenigsegg One





El Koenigsegg One es uno de los deportivos más bestias jamás creados, la culminación de los sueños de Christian von Koenigsegg, que hace ahora 20 años se propuso crear el superdeportivo perfecto. Imaginamos que por aquel entonces no podría imaginarse, ni por asomo, la repercusión que tendría su obra en todo el mundo, cómo su apellido acabaría convirtiéndose en sinónimo de las más altas prestaciones posibles en un deportivo con licencia de calle.

Repito, una vez más, que el One:1 sería sin lugar a dudas la culminación de una larga trayectoria, de momentos muy gratos, pero también muy duros, como nos contó el propio Christian en nuestra visita a la fábrica de Koenigsegg. ¿Pero por qué se llama One:1 este modelo? ¿Qué hace que sea tan especial, incluso más que LaFerrari o el McLaren P1? ¿Qué soluciones innovadoras se han aplicado en su construcción?





El verdadero megacar. ¿Por qué un nombre tan rimbombante como ese? Koenigsegg se define como un fabricante nacido con el único objetivo de mejorar una y otra vez las prestaciones de sus deportivos. El uno de su nombre y la definición de megacar haría referencia al hecho de que esta máquina entrega la espectacular cifra de 1 MW a 7.500 rpm. Según Koenigsegg es el primer deportivo homologado que ha logrado tal hazaña.

Algo más que fibra de carbono. Construído sobre la base del Agera R, para diseñar el One:1 y alcanzar su asombrosa relación entre peso y potencia Koenigsegg tuvo que ir más allá de elevar la potencia hasta el límite que ya conocemos, hacer prácticamente milagros para rebajar el peso en más de 80 kilogramos. ¿Y cómo rebajas el peso de un superdeportivo que ya ha sido optimizado hasta el límite? Koenigsegg tuvo que desarrollar compuestos de fibra de carbono aún más rígidos y ligeros y reducir su grosor hasta los límites que fueran permisibles para conservar su rigidez estructural y su resistencia al choque. Koenigsegg ha llevado a cabo un intenso trabajo de análisis informático para encontrar el grosor ideal de cada pieza y tuvo que combinar el uso de fibra de carbono en la carrocería con otros materiales como el kevlar.

Para el día a día, o eso dicen. Lo creas o no Koenigsegg no concibe a su bestia únicamente como un superdeportivo de circuito. Su radicalidad contrasta con el hecho de que no falten elementos de confort como apertura y cierre de ventanillas eléctrico, posición ajustable del volante y los pedales, asientos deportivos ajustables, equipo de sonido con conexión USB, climatizador y cámara de aparcamiento trasera. Opcionalmente podrás adquirir un equipo de sonido mejorado, un set de maletas adaptado al espacio de carga del One:1 o incluso un sistema de cancelación activa del sonido.
Máxima exclusividad. Los detalles concretos acerca del Koenigsegg One:1 no están del todo claros. Sí sabemos que su precio es de varios millones de euros, así como que las unidades producidas podrán contarse con los dedos de las manos y ya habrían sido adjudicadas a sus orgullosos clientes.

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